Cuatro personas fueron detenidas  en el sudoeste de Filipinas por haber matado, quemado y devorado en parte a un  invitado durante un casamiento, sirviendo los restos de su cadáver en la  recepción, declaró este miércoles la policía.
 
La comisaria de la ciudad de Narra, Perla Bacuel, agregó que la policía  sospechaba que algunos de los detenidos habían estado involucrados en otras  desapariciones en la isla de Palawan, donde ocurrieron los hechos, desde los  años 80.
 
Según Barcuel, un trabajador agrícola, Eladio Baule, su hijo Gerard Baule y  sus sobrinos Sabtuary Pequi y Johnny Buyot mataron a Benjie Ganay el 17 de  julio luego de que este último hubiera tocado por accidente las nalgas de la  hija de Eladio Baule durante un casamiento.
 
Los sospechosos, que estaban borrachos, incendieron el cuerpo y la  comisaria estima que el olor del cadáver los habría incitado a comer algunas  partes.
 
El padre y el hijo sirvieron luego carne asada a otros bebedores que  participaban en la fiesta de casamiento.
 
El caso sólo se descubrió ocho días más tarde, gracias a la confesión de  los sobrinos, que la policía no quiso creer en un primer momento. Los sobrinos  afirman que no participaron en el asesinato y que fueron obligados a comer  carne humana.
 
La comisaria Bacuel declaró que es la primera vez que escucha hablar de una  historia de este tipo en la región. Según dijo, la policía investiga la  posibilidad de que Eladio Baule pertenezca a una secta extraña.