El pívot Shaquille O’Neal, el gigante de 2,16 metros de altura y 154,2 kilos que en julio pasado llegó al Heat, de Miami, prometiendo un título de la NBA, comenzó su ambientación en la ciudad ofreciendo 20 millones de dólares por una mansión.
La propiedad está en el selecto sector de Star Island donde viven otras celebridades, como el rapero Sean P. Diddy Combs, la cantante Gloria Estefan y su marido Emilio, uno de los principales productores de música latina en EE.UU., y la actriz Rosie O’Donnell, entre otros.
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La casa está amueblada, tiene 1.808 metros cuadrados, ocho baños, ocho dormitorios, cancha de tenis, cancha cubierta de racquetbol, gimnasio, piscina y garaje para cuatro automóviles. Además cuenta con la ventaja que fue acomodada en 1990 por un inquilino anterior, el libanés Rony Seikaly, quien también fue centro del Heat y mide 2,10 metros, arregló puertas de 2,50 y otros enseres para personas de gran altura.
De acuerdo a Nelson González, el agente de bienes raíces encargado de la transacción, aunque 20 millones de dólares puede parecer una cantidad exagerada ahora, con la continua alza de los precios en Miami, se trata de una excelente inversión.
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González informó que muy pronto se cerrará la transacción entre el basquetbolista y el actual dueño de la casa, Juan Correa, un ejecutivo de la Ecuador Bottling Company, la principal embotelladora de Coca Cola en ese país, y quien pedía 24 millones de dólares por la vivienda.
La mansión ocupa un lote de un poco más de una hectárea, uno de los mayores de la isla, y en el 2003 pagó impuestos anuales de propiedad por 362.139 dólares.