Una indígena ecuatoriana fue capturada este lunes en  Bogotá cuando entregaba a un presunto enlace de la guerrilla de las FARC, 320  detonadores para explosivos, que había trasladado desde Quito camuflados en una  faja atada a su cuerpo, reveló un vocero de la policía colombiana. 
 
El coronel Yesid Velásquez, comandante de la policía en el departamento de  Cundinamarca (centro), precisó a periodistas que la indígena fue identificada  como Dolores María Cabrera, oriunda de Otavalo (Ecuador), y quien se desplazó a  Bogotá en un autobús de servicio público. 
 
"Los estopines (detonadores) los traía adheridos al cuerpo con una faja y  venía desde Ecuador en un bus, con el peligro de que esos elementos hicieran  explosión debido al calor o a cualquier otra circunstancia", señaló Velásquez. 
 
El oficial agregó que en el operativo, realizado en un sector del sur de  Bogotá, fue capturada también Doris García, acusada de apoyar logísticamente a  las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y de ser la encargada  de comprar y distribuir material de guerra para los diversos frentes del  grupo. 
 
Velásquez explicó que "veníamos haciendo unos seguimientos a García porque  sabíamos que iba a recibir un material, sin conocer exactamente de qué se  trataba, y la sorpresa fue la llegada de la indígena con los detonadores". 
 
Señaló que las autoridades investigan la posibilidad de que los estopines  estuvieran destinados a una ofensiva dinamitera, el próximo 7 de agosto, cuando  se cumplen dos años del gobierno del presidente Alvaro Uribe. 
 
"Sí, hay información de que de pronto el próximo 7 de agosto, no solo en  Bogotá sino en el resto del país, van a querer hacer actos terroristas y  estamos investigando si ese es el objetivo de estos elementos", indicó el jefe  policial. 
 
Velásquez manifestó igualmente que las autoridades reforzaron los controles  y las revisiones en la zona fronteriza con Ecuador, porque se presume que  existe otro material bélico próximo a ingresar al país.