Soldados estadounidenses e iraquíes se enfrentaron este domingo con insurgentes en un combate que escaló de tiroteos a duelos de artillería cerca de la ciudad de Bakuba, muriendo 13 militantes iraquíes, dijo el ejército de Estados Unidos. 
 
Las fuerzas iraquíes y estadounidenses no sufrieron bajas en los combates ocurridos en Buhriz, a unos 60 kilómetros al norte de Bagdad. 
 
Qayser Hameed, un empleado de un grupo de emergencia en el hospital general de Bakuba, dijo que habían sido llevados al sitio dos muertos _ un agente de policía y un civil_ y seis civiles heridos. Algunas de las víctimas tenían heridas de bala, otras, de metralla, indicó. Se ignora inicialmente si los dos muertos llevados al hospital formaban parte de los 13 muertos de que informó el ejército. 
 
Yasir Ahmed Ismail, el policía muerto, falleció dentro de su vivienda al caer un proyectil de mortero, dijo el teniente de la policía Mohamed Adel. 
 
El enfrentamiento fue parte de una ola de violencia a través de Irak que mató a un soldado estadounidense cerca de la ciudad de Beiji, a un ex funcionario de Bagdad y a su hijo en la capital, a dos policías al sur de Bagdad y a cinco personas en una serie de ataques en la ciudad norteña de Kirkuk. 
 
Soldados estadounidenses y de la Guardia Nacional de Irak ingresaron en la madrugada del domingo a un palmar al sur de Buhriz y destruyeron un sitio aparentemente usado por la resistencia para atacar a fuerzas de la coalición e iraquíes, dijo el mayor Neal OBrien, vocero de la Primera División de Infantería. 
 
Durante la incursión, los militantes atacaron a fuerzas de la Guardia Nacional de Irak con armas de calibre pequeño y las fuerzas iraquíes los persiguieron hasta el sector sur de la población, dijo OBrien a The Associated Press. 
 
Alrededor de las 11.00 de la mañana los combatientes iraquíes comenzaron a disparar proyectiles de mortero de manera indiscriminada y soldados estadounidenses respondieron con fuego de artillería, señaló. 
 
Secuencias filmadas por Associated Press Television News mostraron grandes explosiones, aparentemente de fuego de artillería y de morteros en partes de Buhriz y a residentes huyendo de los enfrentamientos. Un helicóptero Apache del ejército de Estados Unidos sobrevolaba la zona. 
 
Combatientes iraquíes locales, algunos vestidos con ropas blancas y cubriendo sus rostros con pañuelos rojos, y otros con ropas negras y pasamontañas, merodeaban por las calles portando fusiles y lanzagranadas. 
 
Por otra parte, la explosión de una bomba colocada al lado de una carretera mató a un soldado estadounidense y dejó herido a otro en el norte de Irak, informaron el domingo fuentes militares. 
 
El portavoz del ejército estadounidense, sargento primero Robert Powell, dijo que la bomba fue detonada poco antes de las 4 de la tarde del sábado, cerca de la ciudad de Beiji, a unos 145 kilómetros al sur de la ciudad septentrional de Mosul. 
 
Un soldado adjunto a una patrulla de logística de la 1ra División de Infantería sufrió lesiones serias y falleció la noche del sábado en un hospital militar. Otro efectivo estaba hospitalizado en condición estable. 
 
Con el fallecimiento, subió a 904 el número de bajas militares estadounidenses en Irak desde el comienzo de la guerra, de acuerdo con un conteo de la AP. 
 
Varios hombres armados mataron a un ex funcionario regional, quien trabajó bajo el régimen de Saddam Hussein, durante un ataque perpetrado desde un vehículo en movimiento en Bagdad la madrugada del domingo, informó la policía. El hijo del funcionario fue muerto también. 
 
El general de brigada Jaled Dawoud, ex jefe del distrito de Nahyia en Bagdad, viajaba con su hijo en un automóvil por el suburbio meridional de al-Dora, aproximadamente a las 8.30, cuando los insurgentes se acercaron en otro vehículo y abrieron fuego, dijo el teniente Mustafá Abdulá al-Dulaimi, jefe policial en el vecindario. 
 
Los atacantes huyeron, según la fuente. El hijo de Dawoud no fue identificado.