Ambos equipos se enfrentaron en la primera fase del torneo.

Portugal y Grecia juegan hoy (13h45 de Ecuador) en el estadio de la Luz de Lisboa una final inesperada de la Eurocopa, en la que la selección local es favorita, pese a que perdió ante los griegos en la primera fase, por lo que el partido es una revancha.

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Ambos equipos se midieron en el primer encuentro de la Eurocopa, dentro del Grupo A, con victoria de Grecia por 2-1, lo que hizo sonar la alarma en la selección lusa, al perder en principio con uno de los supuestos rivales más flojos de la llave, aunque luego se demostraría lo contrario.

Luiz Felipe Scolari, el técnico brasileño de la selección lusa, pidió excusas tras aquel partido y Gilberto Madail, presidente de la federación, dejó de ir al estadio en los siguientes, al no soportar la presión del público.

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Luego de aquel encuentro, la prensa portuguesa coincidió en que su equipo no había podido soportar la presión y la ansiedad, los mismos fantasmas que había sufrido en el pasado y que habían impedido al país ganar ningún título, pese a la calidad contrastada de los futbolistas del Brasil del continente europeo.

Nadie dio crédito tras esa victoria a Grecia, que demostró en los siguientes encuentros que la victoria ante Portugal se debió en buena parte a sus virtudes más que a los defectos de los lusos.

Tras aquel encuentro, Portugal se recuperó y tomó otra cara. Ganó sucesivamente a Rusia (2-0) y España (1-0) terminando primero de grupo, y  después eliminó a Inglaterra (2-2 y penaltis), en cuartos de final, y Holanda  (2-1) en semifinales.

Portugal debe desconfiar de Grecia, un equipo anárquico antes de la llegada en el 2001 del técnico alemán Otto Rehhagel, que se ha convertido en un cuadro disciplinado hasta límites insospechados.

Esa seriedad defensiva le hizo, además de vencer a la selección de Portugal y empatar con su similar de España en la primera fase (1-1), ganar sucesivamente en cuartos de final y semifinales a dos de los favoritos, Francia y República Checa, ambos por 1-0.

Pase lo que pase, tanto Portugal como Grecia habrán superado las expectativas que se habían planteado en la Eurocopa al iniciarse la competición, obteniendo ambos los mejores resultados de su historia futbolística y dejando en el camino a los “grandes”.

PASES
ÁRBITRO

El partido final será dirigido por el juez alemán Markus Merk, lo que ha levantado suspicacias en Portugal debido a su relación de amistad con Otto Rehhagel,  técnico germano de los griegos.

DESPEDIDA
El partido servirá además de despedida a Rui Costa, miembro de la  “generación de oro” del fútbol portugués, que anunció ayer que deja la selección tras la final de hoy, siempre que juegue, ya que pese a su contrastada calidad ha perdido el puesto en favor del brasileño naturalizado Deco.