El gigante farmacéutico GlaxoSmithKline Plc GSK.L se retiró de la prueba clínica de fármacos para combatir el sida, después de que su medicamento de mayores ventas fuera sustituido por el de una compañía rival, informó el miércoles un miembro del Congreso de Estados Unidos.
 
El legislador del Partido Demócrata, Henry Waxman, del estado de California, afirmó que la decisión de Glaxo podría arruinar el estudio, dirigido a hallar el "coctel" de fármacos más eficaz contra el sida para utilizarlo en los países en desarrollo más afectados por la epidemia de sida.
 
"Las acción de su compañía está minando los esfuerzos que se llevan a cabo para determinar cómo dar tratamiento a millones de personas infectadas con el VIH (virus de inmunodeficiencia humana) en todo el mundo", expresó Waxman, miembro de la Comisión de Reforma del Gobierno en la Cámara de Representantes, en una carta en la que instó a la empresa británica a reconsiderar su decisión.
 
Más de 40 millones de personas en el mundo están infectadas con el virus del sida, una enfermedad que ha causado la muerte a 25 millones de seres humanos en 20 años.
 
Aunque no existe cura para el sida, ciertas combinaciones de fármacos, conocidas como "cocteles", pueden prolongar la vida de los pacientes.
 
Sin embargo, con más de 20 medicamentos en el mercado, es difícil saber cuáles son las mejores combinaciones para combatir el sida.
 
Las compañías farmacéuticas suelen probar sus propios fármacos, pero también los donan a las instituciones gubernamentales para que lleven a cabo sus investigaciones.
 
Un equipo patrocinado por los Institutos Nacionales de Salud en Estados Unidos tiene previsto hacer una comparación con tres de esos "cocteles" de fármacos, en los cuales se pensaba usar el medicamento Combivir, el más vendido de Glaxo para combatir al sida.
 
Sin embargo, Emtriva, fabricado por una de las otras cuatro compañías que participan en la prueba -Gilead Sciences Inc GILD.O- sustituyó a Combivir en uno de los ensayos clínicos.
 
"Según un prominente investigador involucrado en el estudio, su compañía intentó presionar a los investigadores para que no hicieran esta comparación (con el fármaco producido por la otra empresa), bajo la amenaza de dejar de suministrar el medicamento", para la prueba, escribió Waxman.
 
Robert Schooley, experto de la Universidad de Colorado, y sus colegas, dijeron que habían decidido probar con Emtriva en una de las combinaciones de fármacos, porque formaría parte de una combinación simple y muy práctica, que utiliza sólo tres píldoras una vez al día.
 
La portavoz de Glaxo, Nancy Pekarek, dijo que la empresa se había retirado de la prueba cuando cambiaron el medicamento, porque ya no se ajustaba a las regulaciones de la Organización Mundial de la Salud.
 
"Consideramos que ya no era adecuado (seguir participando) porque no estaba satisfaciendo ninguna necesidad de salud pública para tratamientos en países de pocos recursos", dijo por teléfono.
 
Según Pekarek, Glaxo ha recibido la carta de Waxman con mucha seriedad y la responderá a su debido tiempo.