Con la única oposición del hasta ahora gobernante Partido Popular, José Luis Zapatero fue investido este viernes presidente del gobierno español.
En pocas horas más, el abogado y político de carrera de 43 años que ganó las elecciones de marzo pasado, se reunirá con el rey Juan Carlos y jurará como presidente del gobierno.
Una vez que sea publicado en el Boletín Oficial este fin de semana, Rodríguez Zapatero asumirá formalmente en su cargo y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) _que gobernó entre 1982 y 1996 y guió la transición a la democracia tras la muerte del general Francisco Franco, en 1975_ regresará al poder tras una pausa de ocho años.
"Y ahora a trabajar para cumplir con las obligaciones, para honrar mi palabra", dijo a la prensa un sonriente Rodríguez Zapatero.
En el Congreso de Diputados, 183 legisladores votaron a favor de Rodríguez Zapatero y 148 en contra. Hubo además 19 abstenciones. Así, superó de manera cómoda los 176 votos mínimos requeridos para conseguir la mayoría absoluta de los 350 escaños, requerida para consagrarlo como presidente del gobierno en una primera vuelta.
Los socialistas lograron 164 escaños en los comicios del 14 de marzo, mientras los conservadores del Partido Popular del hasta entonces presidente del gobierno José María Aznar, obtuvieron 148.
El viernes, los socialistas consiguieron la mayoría con la ayuda de pequeños partidos regionales.
Aznar no buscó su reelección, después de permanecer en el poder durante ocho años, durante dos períodos consecutivos.
Uno de los primeros que acudió a saludar a Rodríguez Zapatero tras la votación fue Aznar, que abandonó de inmediato el recinto legislativo y la vida política española, al menos por ahora. Entre sus planes inmediatos figuran los de dar clases en la Universidad Georgetown de Washington.
Después de un prolongado debate y negociaciones, los líderes de otros dos partidos _ la Izquierda Republicana de Cataluña y la Izquierda Unida_ prometieron respaldar con sus votos a Rodríguez Zapatero.
Así fue posible su consagración como presidente del gobierno, pero no necesariamente significa que exista una luna de miel con esas fuerzas.
Le esperan numerosas decisiones sobre temas que ni siquiera Aznar pudo resolver teniendo la mayoría parlamentaria.
Tal vez la principal tarea internacional sea la intención de Rodríguez Zapatero de retirar los 1.300 soldados que España tiene apostados en Iraq, a menos que las Naciones Unidas asuman el control de la ocupación.
Si las Naciones Unidas no asumen el control político y el mando militar en ese país, las fuerzas españoles regresarán, declaró Rodríguez Zapatero en el debate parlamentario previo a su investidura como presidente del gobierno. También dijo que fijó como plazo el 30 de junio.
El saliente gobierno conservador determinó que el 30 de junio expira el mandato de la tropa.
Muchos españoles desean que así lo haga, de acuerdo con las encuestas, y también lo apoyan la mayoría de los partidos políticos del parlamento.
Gaspar Llamazares, líder de la comunista Izquierda Unida, dijo que es improbable que las condiciones esbozadas por Rodríguez Zapatero se cumplan en la fecha indicada, y los soldados regresarán a España el 30 de junio o antes.
España aún está traumatizada por los ataques ferroviarios de Madrid del 11 de marzo, que mataron a 191 personas, y las amenazas de más ataques realizadas por un grupo relacionado con la red al-Qaida, que demanda el retiro de los soldados de Iraq y Afganistán.
Las fuerzas de seguridad patrullan las vías ferroviarias, plantas de generación de electricidad y otros posibles objetivos.
Entre los temas nacionales que deberá atender Rodríguez Zapatero figura la demanda de más autonomía política de 17 regiones del país, especialmente el País Vasco y Cataluña.
Las encuestas proyectaban un triunfo cómodo del Partido Popular en las elecciones del 14 de marzo. Pero la votación fue afectada en gran medida por los ataques terroristas, que la población consideró como una represalia por el apoyo de Aznar a la guerra en Iraq liderada por Estados Unidos.
Una encuesta de la estación radial Cadena Ser difundida el 29 de marzo, mostró que el 72% de los españoles respalda los planes de Rodríguez Zapatero en Iraq.