El explosivo empleado para perpetrar el múltiple  atentado de Madrid es de la misma clase del utilizado habitualmente por ETA,  informaron este jueves fuentes de la lucha antiterrorista. 
 
Un total de 13 bombas explotaron en cuatro trenes causando la muerte a más  de 173 personas y heridas a 898. 
 
Los investigadores no descartan que algunas bombas hubieran sido colocadas  en la vía o los andenes, mientras que las otras habrían sido situadas en el  interior de trenes. 
 
Los autores del atentado probablemente han utilizado temporizadores para  detonar las cargas, según la misma fuente. 
 
Las cantidades de explosivo utilizado no han podido ser precisadas.