La selección de Perú se embarcó ayer hacia Barcelona para enfrentar a su par de España el miércoles 18 en un amistoso que marcará la reaparición del fútbol peruano en campos europeos luego de cuatro años.

“Para los jugadores y para mí es una gran motivación enfrentar a un rival tan linajudo”, dijo el brasileño Paulo Autuori, técnico de los blanquirrojos, que citó a Juan Carlos La Rosa, del Cienciano, del Cusco, donde ataja el arquero Óscar Ibáñez.

Según lo planificado por la dirigencia de Lima, los “extranjeros”, además de Solano y Palacios, Claudio Pizarro (Bayern, de Munich), Andrés Mendoza (Brujas, de Bélgica) y Miguel Rebosio (Real Zaragoza español) deben llegar a partir de hoy a Barcelona, sede del cotejo, donde realizarán el primer entrenamiento.

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La delegación incaica llega hoy en la tarde a Barcelona, donde tiene previsto hacer un único entrenamiento, la tarde del martes en el campo del estado olímpico de Monjuic.

Además el juego servirá de presentación oficial de la campaña No al racismo en el fútbol español, unidos por la diversidad, que organiza la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) junto a la Coalición Española contra el  Racismo, la Xenofobia y las Discriminaciones Relacionadas.

Perú ganará 100.000 dólares por este partido, según reportó ayer la Federación Peruana de Fútbol.