Miles de manifestantes salieron a las calles de varias ciudades españolas para demandar el fin de la ocupación de Iraq, un año después de marchas masivas contra la guerra en el país árabe.
 
Medios de comunicación españoles informaron que en la marcha de Madrid habrían participado unas 150.000 personas, según los organizadores, y 9.000, según fuentes gubernamentales.
 
La movilización en la capital española, llamada "Un año después, Madrid contra la guerra", fue convocada por el Foro Social de Madrid y finalizó en la Plaza de España, donde el actor Juan Diego Botto y la escritora Rosa Regás leyeron un comunicado.
 
Queremos "transformar esa contestación social en una alternativa al PP. Se traba ahora de derrotar a la derecha y al Partido Popular", dijo a los periodistas el Coordinador General de la agrupación política española Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, quien asistió a la protesta en Madrid.
 
En febrero del 2003, unos tres millones de españoles salieron a las calles de sus ciudades para participar en algunas de las mayores manifestaciones realizadas en Europa contra la guerra en Iraq y para protestar por el apoyo del gobierno español a Estados Unidos en el conflicto.
 
En la ciudad de Valencia -capital de la provincia española del mismo nombre y situada en la costa del Mediterráneo- participaron unas 4.000 personas, según la policía, y más de 30.000, según los organizadores.
 
El gobierno del presidente español, José María Aznar, respaldó la decisión del mandatario estadounidense, George W. Bush, de invadir Iraq y envió 1.300 soldados al país árabe después de concluir la guerra.