El dólar alcanzó este martes un mínimo de tres años frente al yen y cayó frente al euro luego de que un alto funcionario estadounidense alentó la visión de que los ministros del Grupo de los Siete (G7) no tomarán medidas para fortalecer la divisa.
 
El hallazgo de ricina en el Senado estadounidense también impactó negativamente sobre el dólar, dijeron analistas.
 
El subsecretario del Tesoro de Estados Unidos, John Taylor, dijo el lunes que si bien esperaba algún tipo de discusión sobre asuntos monetarios, la agenda sobre el crecimiento lanzada en el último encuentro del G7 en septiembre sería el eje de la reunión de este fin de semana en Florida.
 
"La gente se está empezando a dar cuenta de que no saldrá mucho de la reunión del G7 que logre cambiar la tendencia débil del dólar", dijo Marvin Barth, economista de Citibank en Londres.
 
"Estados Unidos ha dejado claro que mientras sea una caída ordenada, eso beneficia porque no trae inflación y ayuda a solucionar los problemas en la cuenta corriente", agregó.
 
A las 0906 GMT, el euro subía uno por ciento a 1,2568 dólares EUR=.
 
El dólar cayó a 105,32 yenes JPY=, su mínimo nivel en tres años, pero apenas por debajo del cierre del lunes.
 
La Casa Blanca presentó el presupuesto el lunes y estimó un déficit récord de 521.000 millones de dólares para el año fiscal 2004, alimentando un sentimiento negativo hacia el dólar. 

En el centro de las preocupaciones del mercado se encuentra el próximo encuentro de los ministros de Finanzas del G7 y los banqueros centrales en Florida, entre el 6 y el 7 de febrero. El dólar ha estado bajo presión por el déficit de la cuenta corriente de Estados Unidos y la percepción de que Washington está conforme con una moneda débil.
 
El ministro japonés de Finanzas, Sadakazu Tanigaki, se hizo eco de las declaraciones de Taylor y dijo el martes que asuntos estructurales y macroeconómicos tendrán un peso mayor en las conversaciones, aunque agregó que "el tema del tipo de cambio no va a ser descuidado por el G7".