Una propuesta para reelegir al presidente de Colombia, Álvaro Uribe, o ampliar su período de gobierno revivió este miércoles, cuatro días después de que una encuesta reveló que tiene popularidad del 80%, la más alta de un mandatario en el país en la última década.
 
La embajadora de Colombia en España y dos veces candidata presidencial, Noemí Sanín, propuso impulsar una reforma constitucional que permita la reelección de Uribe o ampliar su periodo de gobierno de cuatro años, iniciativa que desató un debate político.
 
"Analicemos la posibilidad de la reelección de los presidentes o si es posible la ampliación del período. Me parece que es urgente hacer ese debate para que los colombianos decidamos sobre esta materia", dijo Sanín a Radio Caracol.
 
Un proyecto de ley que buscaba la reelección presidencial inmediata en Colombia y que hubiera permitido un segundo mandato de Uribe fracasó a finales de octubre, días después de que la mayoría de las 15 iniciativas de un referendo fiscal y político promovido por el presidente no fue aprobada.
 
La constitución de Colombia prohibe la reelección presidencial, por lo que se requiere de una reforma para que Uribe o los ex presidentes puedan aspirar a una nueva elección.
 
Sanín dijo que en Colombia existe un creciente ambiente de optimismo, con mayor seguridad y un buen desempeño de la economía, por lo que se debe permitir que el presidente Uribe continué gobernando por el rumbo correcto.
 
"Estamos en el momento, si lo dejamos para después ya no cabe la reforma", afirmó la diplomática, quien fue derrotada por Uribe en las elecciones presidenciales del 2002.
 
El mandatario, un abogado de 51 años, impulsa una campaña de seguridad para derrotar a la guerrilla izquierdista y a los grupos armados ilegales, un plan de austeridad fiscal, el crecimiento de la economía y busca generar empleo, educación, salud y vivienda para los más pobres.
 
"El presidente lo está haciendo bien. Yo creo que debemos hacer el análisis objetivo de si cuatro años son suficientes para hacer una labor buena de reorganizar el país", concluyó Sanín.
 
La propuesta de la embajadora desató una discusión política con voces a favor y en contra.