Alrededor de 37.000 toneladas de carne congelada están en ruta o almacenadas en puertos, listas para ser enviadas a países que han prohibido su importación desde Estados Unidos desde que el primer caso de mal de la vaca loca fue descubierto en esa nación el mes pasado, dijo ayer un ejecutivo de una compañía del sector .
 
"No han atravesado las aduanas", dijo Mark Gustafson, subdirector general sénior de la división internacional de Swift & Co, en la exposición National Western Stock Show ante unos 100 hacendados, durante un simposio sobre la enfermedad de las vacas locas.
 
El descubrimiento del primer caso de vaca loca en el estado de Washington el pasado 23 de diciembre -primer caso reportado en Estados Unidos- paralizó las exportaciones de carne estadounidense e hizo que los precios bajaran bruscamente.
 
Entre un 30 y un 40 por ciento de los embarques a Asia son cortes enfriados, y el resto congelados, agregó Gustafson, para dar a entender que todavía queda tiempo para solucionar el problema. La carne enfriada se conserva en buenas condiciones por alrededor de 60 días, dijo el ejecutivo.
 
El National Western Stock Show es una reunión anual ya centenaria donde los hacendados y los productores comercian animales.
 
La administración del presidente estadounidense George W. Bush estableció nuevas garantías para el abastecimiento nacional de carne hace dos semanas, entre otras la prohibición de incluir carne de ganado enfermo para consumo humano.
 
Varios expertos de la industria y comercializadores de ganado dijeron que esperaban más anuncios.
 
El senador Wayne Allard, legislador de Colorado, dijo a los hacendados que estaba preocupado porque otros países podrían aprovechar la enfermedad para bloquear las importaciones de carne desde Estados Unidos e impulsar sus propias industrias ganaderas.
 
"No podemos dejar que otras naciones bloqueen la importación de carne estadounidense bajo el disfraz de las vacas locas para mejorar sus propios mercados", dijo Allard.
 
El senador dijo a Reuters más tarde que estaba preocupado por la prohibición que países de la Unión Europea estaban tratando de implementar contra la carne de Estados Unidos.