Armin Meiwes, el "caníbal de Rotenburgo", actuó por afán de sensacionalismo, dijo este lunes ante la corte de Kassel (centro de Alemania) el psicólogo que lo atiende en la prisión de esa ciudad.
Meiwes, de 42 años, quien confesó haber matado y descuartizado a un ingeniero berlinés para comérselo, no padece ninguna enfermedad ni tampoco retraso mental, pero tiene una personalidad inmadura, señaló el psicólogo Heinrich Wimmer ante los magistrados.
El experto indicó que el acusado carece de sensibilidad y es incapaz de controlar sus deseos e impulsos.
Bernd Juergen Brandes, de 43 años, la víctima del "canibal de Rotenburgo" accedió a filmar en varias cintas de vídeo el atroz acto de antropofagia perpetrado el 10 de marzo de 2001.
Meiwes actuó por afán de sensacionalismo, para llamar la atención pública, afirmó el psicólogo que lo atiende en el penal de Kassel donde está recluido mientras dura el juicio.