El deporte argentino está de fiesta tras los casamientos, anoche, del mejor tenista local y quinto en el mundo, el joven Guillermo Coria, y del popular futbolista del Boca Juniors, Guillermo Barros Schelotto.
Guillermo Coria, a los 21 años un símbolo del tenis argentino, contrajo matrimonio con Carla Francovigh, de 19, luego de cuatro años de noviazgo en una iglesia de San Nicolás, una localidad de la provincia de Buenos Aires.
"Un lugar neutral", explicó Coria, quien nació en Rufino, una localidad de la provincia de Santa Fe, ubicada a 476 kilómetros al norte de Buenos Aires, mientras que su actual esposa lo hizo en la ciudad santafesina de Rosario.
Coria sorprendió a sus 300 invitados a la fiesta cuando mostró su camisa blanca, especialmente diseñada para la ocasión, que tenía atravesada una banda roja que simulaba la camiseta del River Plate, equipo de fútbol del que es fanático.
Pero esa no fue la única presencia riverplatense de la noche, los jugadores Marcelo Salas, Marcelo Gallardo y Andrés DAlessandro estuvieron entre los invitados.
Los ausentes más notables fueron el presidente argentino Néstor Kirchner y su esposa Cristina Fernández, que estaban invitados a la boda.
"Estoy más nervioso que en un Grand Slam", reconoció Coria, quien dijo que conoció a su actual esposa hace cinco años cuando Carla tomaba clases de tenis con una amiga suya.
Coria, que finalizó quinto en el ranking mundial de tenis luego de ganar cinco títulos en 2003, no tendrá luna de miel ya que el 1 de enero viajará a Qatar para jugar el torneo Doha.
En tanto, en la catedral de la ciudad de La Plata, a 100 kilómetros de Buenos Aires, Guillermo Barros Schelotto, de 30 años, se casó con la economista Matilde Carriquiriborde, de 27.
El delantero del Boca Juniors, que este año ganó el torneo local Apertura, la Copa Libertadores y la Intercontinental, fue ovacionado por mil curiosos y fanáticos que se acercaron hasta la catedral para ver el enlace.
Debido a la popularidad del jugador, y de su hermano mellizo Gustavo, quien juega en el Rosario Central, se dispuso un operativo de seguridad con cuatro patrullas de policías.
A la fiesta asistieron 400 invitados, entre ellos, los futbolistas Martín Palermo, que tiene contrato con el Betis español, los boquenses Raúl Cascini, Diego Cagna y Guillermo Sanguinetti, del Gimnasia y Esgrima, donde también jugó Schelotto.
Ambos deportistas eligieron esta época del año para casarse debido a sus exigentes calendarios y compromisos deportivos.