Desde pequeña Nelsa Curbelo pensaba en la paz y durante la mayor parte de su vida ha trabajado por ella.
Pero a medida que conoce más situaciones y se compenetra más con los grupos protagonistas de la violencia, se cuestiona internamente ¿qué es la paz?
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“Lo veo como algo etéreo, entonces lo que veo es la ternura, la felicidad y creo que estos son los sinónimos de paz”, reflexiona Curbelo.
Pero también los relaciona con otros valores: justicia, tolerancia, sentimiento, construcciones, responsabilidad.
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Considera que siempre se ha educado a la razón, pero no el corazón y los afectos, “por eso creo que es una tarea pendiente”, advierte.
“Ninguna persona feliz es capaz de hacer daño o agredir a otra, sino pregúntenles a los enamorados”, dice, entonces encuentra que la fórmula para hallar la paz es primero ser felices.
La paz es algo que se refleja en los demás, opina y “está en descubrir en el otro alguien diferente, que lo aceptas precisamente porque no es como tú”, pero cuando eso no sucede entonces surge el conflicto, el enfrentamiento, expresa.
La cuestión del materialismo también es considerado por Curbelo. “En la medida que tengo más posesiones me defiendo de los demás, porque siento como si me acecharan, pero la carencia me hace sentir la necesidad de los otros”. Otra clave es construir todo lo negativo en algo positivo.