El representante de Comercio estadounidense, Bob Zoellick, y el canciller brasileño, Celso Amorim, llamaron este jueves a sus 32 colegas reunidos en Miami a negociar un ALCA "práctico" y "realista", aunque reduzca el mandato original definido en 1994.
 
"Las amplias metas delineadas hace nueve años eran simplemente eso, sólo  amplias metas. Necesitan definición y necesitan claridad", dijo Zoellick, que  co-preside el proceso junto a Amorim, en la sesión inaugural de la reunión  ministerial del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
 
"Las economías del hemisferio y del mundo son diferentes a principios de  2000 que a principios de 1990", justificó Zoellick, que también subrayó la  dificultad de lograr un acuerdo único entre "34 países muy diferentes".
 
Zoellick indicó que "el desafío es cómo avanzar hacia la creación de un  mercado de 800 millones de personas y 13 billones de dólares".
 
"Creo que hoy y mañana (viernes) podemos dar algunos pasos muy prácticos y  también creo que estamos desarrollando el espíritu para dar esos pasos juntos y  seguir avanzando", añadió.
 
Amorim, por su lado, subrayó la necesidad de acordar un ALCA "posible",  "flexible" y "ambicioso, pero equilibrado".
 
"Nuestra principal tarea aquí es concretar un paso adelante, tener una  declaración propiciadora que nos hará posible continuar intensas  negociaciones", sostuvo el canciller brasileño, defendiendo asimismo el acuerdo  entre su país y Estados Unidos para tener un ALCA reducido.
 
"En lugar de echarnos la culpa uno al otro (...) debemos ver lo que es  posible. Y en mi opinión lo que es posible (obtener a partir de Miami) es  bastante amplio, es bastante ambicioso", afirmó.
 
"Estamos siendo realistas, lo que podemos avanzar ahora no es poco cosa",  insistió.
 
Brasil y Estados Unidos se pusieron de acuerdo para que la reunión de Miami  resuelva negociar un ALCA que contenga dos niveles de compromiso.
 
Si el viernes los ministros de 34 países aprueban el borrador de la  Declaración de Miami compaginado por el Comité de Negociaciones Comerciales  -que se basa en la propuesta conjunta realizada por Brasil y Estados Unidos-  las naciones deberán negociar todos los temas de la agenda.
 
También adoptarían un conjunto común de derechos y obligaciones en cada  área, pero quienes deseen podrían concluir acuerdos bilaterales o regionales  para avanzar más rápido en los temas que deseen.
 
Esta propuesta generó el rechazo de países que ya cuentan con acuerdos de  libre comercio con Estados Unidos, como Canadá, México y Chile, así como de los  empresarios estadounidenses, que reclaman acuerdos más ambiciosos que sean  vinculantes para todos.