Es increíble que entidades estatales como la Empresa Eléctrica pueden abusar de los consumidores ya que aducen que el error es del usuario sin admitir su culpa, y protegen con el espíritu de cuerpo a malos elementos que son sus trabajadores.
Hace dos meses exactamente se me llevaron mi medidor por “error”, y no retiraron el que debían, por lo que mi padecimiento llegó hasta la Defensoría del Pueblo sin conseguir la ayuda del caso, ya que en las reuniones efectuadas me decían que debía cancelar $ 138 aproximadamente, pues ese es el nuevo valor de los medidores.
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¿Por qué nunca me devolvieron el mío?
¿Es que acaso hay interés de conseguir nuevos ingresos a costillas de nuestros escuálidos bolsillos?
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Conseguí solo que me descontaran los $ 20 del medidor anterior, haciéndome pagar el saldo en el plazo de un año, ya que no tengo capacidad económica.
¡Qué injusticia!
Ing. Yan Cornejo Montoya
Guayaquil