Con satisfacción disfruté en la edición del 9 de octubre, el Especial Infográfico que acertadamente elaboró este Diario para resaltar la historia y el presente de Guayaquil.
El citado suplemento de EL UNIVERSO cuyo esfuerzo deviene en el legítimo orgullo de imágenes y comentarios tan bien ejecutados, al referirse al arte de los murales del paso a desnivel ubicado entre las avenidas Francisco de Orellana y Guillermo Pareja R., señala el seudónimo Sanchini, del artesano que tomó siete de las acuarelas editadas en el álbum Guayaquil Antiguo, por el Centro de Investigaciones y Cultura del Banco Central del Ecuador en 1981; cuyos originales fueron presentados en la exposición que realizó el Museo Municipal de Guayaquil ese mismo año.
Luis Wallpher desarrolló gran parte de su vida artística fuera del país, pero eso no lo hace ajeno a su patria, por el contrario, fue el eslabón que unió artisticamente al Ecuador con países hermanos que lo honran y enaltecen con fraternal reconocimiento.
Además, siempre llevó en su mente a la patria, por eso puso en imágenes, parte del vivir diario de los suyos, para conocimiento de generaciones posteriores.
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Por todas estas razones he solicitado al Municipio de Guayaquil se ponga en esos murales y en la placa correspondiente, el nombre de Luis Wallpher, conforme se ha hecho con el fallecido artista Antonio Del Campo, en las pilas del paso a desnivel de la avenida Carlos Julio Arosemena, intesección de la avenida Miraflores.
Les reitero mi admiración y gratitud por el justo reconocimiento a mi padre.
Carmen Wallpher de Salguero
Guayaquil