Le gusta la música clásica y alegre, los vegetales y la historia, cree que el amor a Dios salvará al mundo.

A los 6 años recibió la llamada de Dios, confiesa monseñor Luis Arias Altamirano. Con voz calmada y tranquila, como respirando las palabras, se va de viaje por su vida, el tiempo le ha regalado mucha alegría.