Una persona culta es aquella que cultiva no solo su intelecto, enriquece sus conocimientos y sus técnicas, sino que además cultiva su interior, espíritu y busca todo lo que lo haga mejor como persona.
Vemos a nuestros alrededores personas muy instruidas en determinadas áreas, técnicas, incluso con profesión en mano, pero con un alto nivel de vulgaridad sin respeto ni pudor. ¿Se le podría llamar culta a una persona de esta naturaleza? ¡Estoy segura que no! Solo podremos decir que esa persona es instruida o conoce mucho de su materia, nada más.
Así como cuidamos que los ladrones no roben nuestras cosas materiales, también tratemos de cuidarnos y estar alerta de que no entren los invasores a robarnos nuestros valores morales, que son mucho más preciados.
María Leonor G. de González
Guayaquil