Dos ‘cornadas’ de Vieri

Christian Toro Vieri, de Italia, fue el primer jugador que venció la portería de Ecuador en un mundial de fútbol, el de Corea-Japón 2002. Sucedió en el Domo de Sapporo, donde la tricampeona del mundo se impuso 2-0 a la Tricolor.

Antes los azzurras el equipo nacional mostró mucho nerviosismo. Tanto así que bastaron 20 minutos para que los hombres, que dirigía el técnico Giovanni Trapattoni, concreten en dos ocasiones.

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Fue a los 6 y 26 minutos que Vieri, aprovechando la errática marcación rival, venció al portero José Francisco Cevallos, quien –pese a que cayó en dos ocasiones– fue el mejor jugador de la Tricolor.

Después de las anotaciones de los italianos el elenco de  Ecuador intentó reaccionar, sobre todo en la segunda etapa, pero le fue imposible anotar. Por eso fue que al final del encuentro su técnico, Hernán Darío Gómez, dijo: “...nos faltó soltura y tranquilidad... Pagamos derecho de piso”.

Una ilusión frustrada

Un gol de Agustín Delgado a los 5 minutos del juego ante México hizo soñar con la primera victoria de Ecuador en Corea-Japón 2002. Pero no, al final la Tri perdió 1-2.

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Delgado, goleador de las eliminatorias sudamericanas, destelló en el equipo del Bolillo al ser el único que logró sobrepasar una infranqueable pared defensiva de los aztecas, conectar un cabezazo y anidar el balón en la portería del guardameta Óscar Pérez.

Hasta ese momento, en el polideportivo de Miyagi y en distintos rincones del planeta, los ecuatorianos celebraban emocionados. Pero 22 minutos después Jared Borguetti, revelación de la selección azteca en el torneo de Asia,  empató. Y en la etapa de complemento Gerardo Torrado liquidó la ilusión.

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“A Ecuador le faltó personalidad”, dijo al término del encuentro Bolillo y, sintiéndose eliminado, aseveró: “No tuvimos espontaneidad para jugar un mundial”.

El adiós fue histórico

Édison Méndez fue el hombre que le dio la primera victoria a Ecuador en un Mundial de Fútbol. Pasó ante Croacia, el 13 de junio, día en que la Tricolor se despidió de Corea, Japón, pues de su grupo: el G, clasificaron México e Italia a la siguiente fase.

En el encuentro ante la selección que había sido tercera en Francia 98, el equipo de Hernán Darío Gómez jugó un partido diferente. Con más aplomo y personalidad y se impuso al de Mirko Jozic.

Édison, que había sido base en el cuadro nacional que accedió a la Copa Mundo, no resaltó tanto en la etapa inicial del compromiso, pero en la de complemento (ante la carencia de creadores en el medio campo) asumió la responsabilidad de completar la función como “motor” del equipo, con Álex Aguinaga.

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Y a los 48 minutos Méndez se convirtió en la figura de Ecuador, cuando aprovechó una habilitación de Agustín Delgado, quien bajó un balón de cabeza, y con remate rasante de zurda venció al portero Stipe Pletikosa.

En ese instante, aunque la selección estaba eliminada, la celebración fue histórica.