Para solucionar el déficit del Hospital Militar cuando la miseria popular ecuatoriana demanda la decisión de gestiones para salir de la crisis nacional, urge desarrollar un replanteo estratégico.

Evitar el dispendio de recursos en previsión de potentes armas de guerra, ante un remoto deterioro de las óptimas relaciones actuales con el Perú, lo cual ambos pueblos no desean que ocurra jamás.
Otra estrategia sería recuperar los pagos efectuados por $ 18 millones para la “adquisición” de dos helicópteros para la Marina, de los que no arribó al país ni un solo tornillo.

Así se solucionarían los inconvenientes del digno Hospital de las Fuerzas Armadas, al borde de la quiebra.
Crnl. (r) Ernesto Checa
Quito