Dieciocho guerrilleros de las FARC y el ELN se   entregaron al Ejército y la Policía de Colombia para acogerse a un programa  gubernamental de reinserción a la vida civil, informaron este lunes fuentes  oficiales.

 

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Los rebeldes, incluido el tercer hombre al mando de una facción insurgente,   desertaron el pasado fin de semana en el noroccidental departamento de  Antioquia, dijo a periodistas el comandante de la Policía en esa región,  coronel Pedro Molano.

 

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Once de los guerrilleros se entregaron al Ejército y los restantes siete a   la Policía, agregó el oficial, que indicó que los rebeldes entregaron sus  respectivos fusiles, municiones e información sobre el accionar de los  distintos frentes.

 

Por su parte, el comandante de la Cuarta Brigada del Ejército, general   Mario Montoya, atribuyó las deserciones a la presión de las tropas y a una  campaña publicitaria del gobierno que invita a los rebeldes, mediante mensajes  radiales, a vincularse a un programa de reinserción que incluye ayudas  económicas y asistencia en salud y educación.

 

"Como bien lo ha dicho el cabecilla que se entregó, alias González, esto   obedece a la presión de las tropas, a la contundencia y a la persistencia de  las operaciones. También se debe a la publicidad que se le ha dado al plan del  gobierno sobre la entrega de armas y la reinserción", afirmó Montoya.

 

En breves declaraciones a la prensa, algunos de los desertores denunciaron   que fueron engañados por sus superiores con falsas promesas, que sufrían malos  tratos, recibían poca alimentación y que se hallaban enfermos.

 

"Nos decían que nos iban a dar dinero, que íbamos a vivir bien, pero cuando   llegamos vimos que todo era mentira", declaró uno de los guerrilleros.

 

"Realmente soportaba mucha hambre y malos tratos", dijo otro de los   desertores, quienes fueron escuchados en indagatoria por un fiscal y  trasladados a Bogotá.

 

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de   Liberación Nacional (ELN) son los principales grupos rebeldes del país con unos  17.000 y 4.000 efectivos, respectivamente.