El ex boxeador fue el primer ecuatoriano que peleó por un campeonato mundial de esta disciplina.
Su hazaña la realizó en 1967, en la arena Budokan, de Tokio, frente al japonés Iroshi Kobayashi, en la categoría welter.
Valladares vivía solo en su domicilio, por lo que al no haber sido visto en los últimos días, sus vecinos decidieron abrir la puerta y encontraron que había fallecido, aparentemente por un paro cardiaco.
El cuerpo de Valladares estuvo ayer en la morgue de la Policía Judicial.
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Los directivos de la Concentración Deportiva de Pichincha ofrecieron velar el cuerpo del recordado boxeador del barrio de San Roque en el teatro Quitumbe.
Ayer, sus amigos Daniel Guanín y Eugenio Espinoza se reunieron urgentemente a las 17h00 para hacer una colecta y colaborar, junto con otras ex glorias del deporte, como Jaime Cabrera y Marco Jurado, para los cortejos fúnebres del ex pugilista.
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Su ex esposa Claudia Mosquera y sus dos hijas viven en Estados Unidos y el boxeador no había tenido contacto con ellas desde 1981.
Desde ahí, el boxeador que solía llenar la plaza de Toros Quito, vivió en una austeridad económica de la que salió finalmente hace seis meses, cuando fue beneficiado con una pensión vitalicia de 300 dólares.
Pero jamás pudo salir de la soledad.