perdió la vida al caer por una duna, el 11 de enero, en tierras libias.Otro episodio dramático fue cuando una mina explotó, el 12 de enero, al paso de un camión en la frontera entre Libia y Egipto, lo que por suerte no causó víctimas.Deportivamente, la carrera se saldó con dos ganadores que ya estaban en lo más alto de la jerarquía. Masuoka se impuso el año pasado, mientras que Sainct venció en 1999 y 2000.El japonés declaró, cuando ya era campeón, que “no había ninguna consigna sobre la primera o segunda plaza, solamente que levantáramos el pie para no incurrir en riesgos. Después ocurrió lo de Inch Allah”, precisó el japonés sobre la etapa en que Peterhansel tuvo la avería.Al volante de su Mitsubishi Pajero Evolution, uno y otro dominaron por completo la especialidad de autos –10 de las 17 especiales–, que se esperaba más abierta con la llegada de Nissan, Wolkswagen, Schelesser y BMW.Pero, a excepción del prólogo y la novena etapa, Masuoka y Peterhansel ganaron siempre hasta que su director, Dominique Serieys, decidió conservar, el 14 de enero, las posiciones definitivas.En su primera aparición, la escudería japonesa Nissan mostró su potencial con el finlandés Ari Vatanen. A pesar de que quedó relegado muy pronto en la general por un problema de motor, Vatanen, que regresaba tras haber sido campeón cuatro veces, obtuvo cuatro especiales, incluida la última en Charm el Sheij. De esta forma, amplió su ventaja de mayor vencedor de especiales, que se elevan a 49.El japonés Kenjiro Shinozuka, campeón en 1997, estuvo también en primera fila, pero una caída de 80 metros al salir de una duna le produjo un traumatismo cráneo-facial.Un antiguo campeón del mundo de esquí, el francés Luc Alphand, con un BMW diesel, consolidó definitivamente su transición deportiva al obtener su primera victoria en una especial.En motos, los pretendientes se fueron progresivamente descartando en una carrera por eliminación. Los damnificados fueron el sudafricano Alfie Cox (octava etapa), el español Nani Roma (novena) y el italiano Fabrizio Meoni (décima), campeón en las dos últimas ediciones, que, no obstante, finalizó tercero.Los más regulares –o afortunados– fueron los dos franceses Sainct y Cyril Despres.El vencedor de motos estándar, el brasileño Jean de Azevedo, se mostraba también muy satisfecho. “Mi hermano André y yo hicimos un super Dakar”, aseguró Jean al arribo a la meta.Esta edición, infiel a Dakar por cuarta vez desde 1979, también representó una de las que más participantes vio llegar a la meta. Un total de 186 competidores –la tercera caravana más numerosa de la historia– llegó al desierto del Sinaí, con 86 motos, 61 autos y 27 camiones.","isAccessibleForFree":true}
El brasileño André de Azevedo, que competía junto al dúo checo Tomas Tomecek-Jaromir Martinec, con Tatra, terminó en la segunda plaza en la categoría de camiones, mientras que su hermano Jean de Azevedo (KTM) consiguió un meritorio quinto puesto en la clasificación de motos.