08h00: Empezaron a arribar al estadio Olímpico Atahualpa las delegaciones de Pachakutik y de Sociedad Patriótica. A esta hora, los buses que transportaban a los representantes de la provincia de Cotopaxi se estacionaron en el parqueadero del escenario deportivo.

10h15: Inició el ensayo de las orquestas sinfónicas de Guayaquil, Cuenca y Loja; de la orquesta prejuvenil de Guayaquil y de las bandas de guerra del Ejército y la Policía.

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12h00: Las puertas del estadio se abrieron y empezaron a ingresar las delegaciones partidistas y los estudiantes de los colegios participantes.

A las 13h40 inició el espectáculo, con el saludo a un grupo de siete colegios presentes. Los alumnos se ubicaron en la preferencia del estadio. En la general norte, se colocó la delegación de Pachakutik; en la general sur, la de Sociedad Patriótica. A esta hora, habían llegado unas 25.000 personas. Los militantes portaban carteles de apoyo a Napoleón Villa, cuñado del presidente Gutiérrez. “Estratega del triunfo” decían las pancartas, que se colocaron en lugar de las tradicionales vallas publicitarias, alrededor de la cancha.

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13h50: Un grupo de mujeres de la tercera edad presentó un espectáculo folclórico.

13h55: Llegó la banda del Ejército, que se ubicó cerca de los estudiantes.

14h00: Un militante de Sociedad Patriótica, Ángel Chancay, fue atendido por la Defensa Civil, luego de caer desde la tribuna.

14h10: Intervino un grupo de porristas.

14h25: Los paracaidistas de la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro también participaron en el espectáculo.

14h40: Se presentaron 11 perros de la escuela de adiestramiento de la Policía.

15h30: Diez paracaidistas del Ejército ingresaron a la cancha del estadio con banderas de Sociedad Patriótica.

15h45: Cristóbal Ortega entregó, públicamente, uno de sus cuadros titulado “Matanza”. Se trataba de un obsequio para el Presidente. La pintura, que recreaba la figura de Rumiñahui, traía una leyenda: “Señor presidente,  un gran abrazo y nuestro respaldo porque somos como la paja del cerro que se arranca y vuelve a crecer; y de paja de cerro cubriremos el mundo”.

Pasadas las 16h00, los estudiantes de varios colegios empezaron a reñir y a lanzarse botellas, sin que profesores ni fuerza pública pudieran controlarlos.