El legendario Mario Lobo Zagallo, de 71  años, entrenador interino de la selección nacional de fútbol de Brasil para el  recién pasado amistoso ante Corea del Sur, ha sido hospitalizado en Rio de  Janeiro debido a problemas de aritmia cardiaca. 
 
El cardiólogo de Zagallo, Renato Viella, indicó el martes que el entrenador  fue hospitalizado la noche del lunes y que deberá salir del hospital el  miércoles después de un tratamiento destinado a permitirle recuperar el ritmo  cardiaco normal.

El miércoles pasado, Zagallo, había dado el adiós a su  carrera de entrenador en un partido contra Corea del Sur, después de haber  llevado a Brasil a la final del Mundial 98 que perdió con Francia (0-3) y haber  participado en los cuatro primeros triunfos mundialistas de los auriverdes (dos  como jugador, uno como técnico y otro como asistente del seleccionador). 
 
En agosto pasado, Zagallo ya había sido hospitalizado por un problema de  aritmia cardiaca y debió dejar de entrenar durante una semana al equipo  Flamengo, que entonces dirigía. 
 
El astro Ronaldo dijo la semana pasada en la despedida de Zagallo que "es  el héroe brasileño más grande y la victoria le pertenece a él", al final del  partido que Brasil ganó a Corea del Sur por 2-3, en Seúl, con un gol de penal de Ronaldinho Gaúcho, en el último minuto de partido. 
 
Fue justamente una crisis de convulsiones que Ronaldo sufrió la noche anterior a la final con Francia que ligó a Zagallo con la mayor estrella  brasileña en la polémica por derrota sufrida en la copa del mundo del 98. 
 
Zagallo dirigió su último partido después de que Luiz Felipe Scolari, quien  guió a Brasil al título mundial, decidiera abandonar el cargo y no participar  en este amistoso. 
 
Como jugador fue miembro del equipo que ganó los Mundiales de 1958 y 1962,  antes de ser seleccionador en 1970 y ayudante de Carlos Alberto Parreira en  1994, en los cuatro de los cinco títulos ganados por los canarinhos.