Violentos disturbios estallaron el viernes en la ciudad nigeriana de Kaduna, donde más de 100 personas murieron en tres días de protestas de turbas de musulmanes contra la realización en el país del concurso de belleza Miss Mundo, programado para diciembre.
La Cruz Roja de Nigeria dijo que al menos 105 personas habían muerto hasta el viernes por la mañana, mientras testigos dijeron que luego se registraron más víctimas fatales por los choques entre civiles y las fuerzas de seguridad.
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Las calles de Kaduna, en el norte del país, estaban llenas de basura, en medio de vehículos destruidos y llantas incendiadas. Cientos de residentes abandonaron sus casas llevando algunas pertenencias para huir de los enfrentamientos.
Un periodista de Reuters observó el viernes 13 cadáveres en las calles, mientras testigos dijeron que los atacantes habían lanzado muchos más cuerpos en pozos.
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"Dos de mis hijos fueron asesinados hoy en la casa. Fueron tomados por la policía y los soldados. Los mataron y luego los quemaron", dijo Bello Mijinyawa, un residente musulmán.
Testigos dijeron que los enfrentamientos se extendieron el viernes desde los distritos musulmanes a zonas dominadas por cristianos, pese a un toque de queda las 24 horas del día. En la violencia de los últimos días se enfrentan grupos religiosos mayoritarios de cada área con grupos minoritarios.
Más de 500 personas han resultado heridas durante los disturbios.
La violencia, desatada tras la publicación de una nota en un periódico que sugería que el profeta Mahoma probablemente se habría casado con alguna de las jóvenes que concursan por el título de Miss Mundo, recordó los sangrientos enfrentamientos sectarios que vivió la región hace dos años, cuando murieron miles de personas.
Los alborotadores saquearon tiendas y volcaron autos y los actos de vandalismo pronto se convirtieron en una protesta general contra el concurso de Miss Mundo, previsto para celebrarse el 7 de diciembre en Abuja.
Nigeria obtuvo el derecho a ser sede del concurso de belleza después que la nigeriana Agbani Darego ganó el evento en Sudáfrica.
Residentes de Kaduna dijeron que los musulmanes acusaron a las autoridades de tratar de prohibirles sus oraciones del viernes durante el toque de queda.
El portavoz de la Cruz Roja Patrick Bawa dijo que 521 heridos fueron llevados a hospitales de Kaduna el jueves por la noche.
Los disturbios comenzaron el miércoles, cuando jóvenes musulmanes incendiaron las oficinas del diario independiente This Day en Kaduna, cuyo artículo del 16 de noviembre desató la violencia.
El gobierno del presidente Olusegun Obasanjo hizo un llamamiento a la calma y advirtió que quien fomente la alteración del orden público tendrá que afrontar las consecuencias.
Los disturbios son el más reciente suceso negativo relacionado con la celebración del certamen de Miss Mundo, que se ha visto afectado por protestas contra el hecho de que las mujeres musulmanas en Nigeria son sentenciadas a morir apedreadas por el delito de adulterio.
Reinas de belleza confinadas a un hotel
Lás de 90 concursantes del certamen Miss Mundo, que llegaron a Nigeria el 10 de noviembre pese a la controversa en torno al concurso este año, permanecían el viernes confinadas en un hotel de Abuja.
Pero la tensión alcanzó el viernes esa ciudad al registrarse una estampida humana cuando los musulmanes salían de una mezquita tras la jornada de oraciones. No hubo, sin embargo, escenas de violencia callejera.
Los organizadores del concurso han insistido en que el certamen se realizará de acuerdo a lo previsto.
El concurso Miss Mundo, que según las autoridades de Nigeria permitiría mostrar el país y aumentar el flujo de turistas, inicialmente entró en problemas tras difundirse en todo el mundo el caso de Amina Lawal, una mujer de 31 años que fue sentenciada, bajo la ley islámica sharia, a morir apedreada por haber tenido un hijo fuera del matrimonio.
Tras las garantías del gobierno de que ninguna mujer sería apedreado, unas 90 participantes al concurso llegaron a Nigeria, muchas de ellas apoyando a Lawal y a otras mujeres sentenciadas a muerte por cortes que mantienen vigentes la ley islámica sharia.