El psicólogo especializado en reproducción, Roger Short, dijo que unas pocas gotas de zumo de limón pueden ser una solución barata y de uso fácil para proteger a las mujeres de embarazos no deseados y del contagio con el VIH.

Para lograr esto, hay que exprimir el limón sobre una pequeña esponja o motita de algodón, que luego se introduce en la vagina antes de sostener relaciones sexuales, explicó.