Una intensa ola de frío, sin precedentes conocidos, se ha ensañado con el altiplano andino, donde han muerto 31 personas y se han perdido unas 70.000 cabezas de ganado, principal sustento de los campesinos de la región.
 
Desde el pasado 4 de julio, el altiplano andino ha sido azotado por una ola de frío, con temperaturas inferiores a -20 grados centígrados en algunas zonas de Bolivia y de Perú.
 
Las bajas temperaturas han causado estragos en las regiones más altas de los Andes bolivianos y peruanos especialmente, mientras que la ola de frío apenas se ha dejado sentir en Chile y Ecuador.
 
El número principal de víctimas mortales por el frío se concentra en el sur del Perú, donde el pasado 4 de julio, la repentina bajada de las temperaturas, que provocó intensas nevadas y heladas, se cobró la vida de tres niños.
 
Las bajas temperaturas se han prolongado más de lo previsto y los campesinos peruanos no han podido combatir el frío, que hasta el momento ha causado la muerte a diecinueve personas y ha afectado a otras 61.000, según datos del Instituto Nacional de Defensa Civil.
 
Los departamentos peruanos de Cuzco, Puno, Ayacucho, Arequipa, Apurimac, Huancavelica, Tacna y Moquegua quedaron cubiertos por un manto de nieve que ha provocado la muerte de entre 15.000 y 20.000 cabezas de ganado, principal sustento de los campesinos de la zona, según datos del Ministerio de Agricultura peruano.
 
La grave situación climatológica obligó al gobierno presidido por Alejandro Toledo a declarar el estado de emergencia en la zona.
 
 El propio presidente se desplazó el pasado fin de semana a la ciudad de Juliaca, en el departamento de Puno, para llevar personalmente ayuda a los damnificados.

Juan Coronado, director del Sistema Nacional de Meteorología e Hidrografía de Perú (SENAMHI), aseguró hoy a EFE que este fenómeno, que se produce todos los años, ha afectado a los Andes con especial virulencia en esta ocasión por la combinación de aire frío, en los niveles altos, y corrientes de vientos fuertes, en las zonas medias que provocan acumulación de humedad.
 
Según Coronado, la ola de frío continuará, con menor intensidad, hasta la próxima semana, porque "aún hay condiciones de aire frío aproximándose a la zona andina".