Unas 4.000 personas desnudas posaron ayer para el artista estadounidense Spencer Tunick en el frontis del Museo de Arte  Contemporáneo, en una representación que fue apoyada por el presidente chileno Ricardo Lagos, pues las imágenes “no tenían nada de atentado a la moral”. 

Lagos consideró que fue un espectáculo “bonito” que no atenta contra la ética de los chilenos.