Si pierden son cuestionados por sus planteamientos, la inclusión o no, de determinados futbolistas.
Si ganan, cualquier mala actuación –por más reciente que sea– queda detrás, porque los aficionados al fútbol son seres resultadistas.
Publicidad
Con los planteamientos cada vez más rígidos, los técnicos también son evaluados por la vistosidad que exhibe su equipo, más allá de la derrota o el triunfo.
Luiz Felipe Scolari o Felipao, brasileño, y Rudi Voeller, no son la excepción.
Publicidad
Ambos llegaron a la final de hoy, cargados de críticas. Ahora son héroes por el hecho de estar en la final del Mundial Corea-Japón 2002.
Los brasileños llegaron a esta instancia tras vencer por 1-0 en semifinales a Turquía, la selección más difícil que han enfrentado en el torneo.
Los alemanes iniciaron su camino, aprovechando las debilidades de Arabia Saudita para humillarlos por 8-0 en su estreno, el tanteador más abultado del campeonato.
Scolari contó con el juego desequilibrante de Ronaldinho Gaucho, más los goles de Ronaldo (6) y Rivaldo (5).
Para llegar a esta instancia, Voeller basó su juego en el arquero Oliver Kahn, el goleador Miroslav Klose (5) y el líder Michael Ballack, quien se perdió la final por acumular dos tarjetas amarillas.
Son los técnicos finalistas, aquellos personajes del banquillo que transformaron las críticas en elogios.
FRASES
“Tras todo esto quiero volver a casa y mantenerme apartado de todo. Mi período de trabajo con el equipo de Brasil finalizó con la tarea que acordé con el presidente de la CBF (Ricardo Texeira). Quiero estar siete días sin fútbol y después veremos qué pasa en mi vida.
La Copa del Mundo ha sido una experiencia maravillosa”.
LUIZ FELIPE SCOLARI
TÉCNICO DE BRASIL
“No siempre los equipos que juegan mejor al fútbol ganan los partidos o son campeones. Si fuera así, Brasil hubiera sido campeón del mundo en 14 ocasiones.
La verdad aspirábamos llegar hasta los cuartos de final, pero nos fue mejor de lo que pensábamos”.
RUDI VOELLER
ENTRENADOR DE ALEMANIA