El portero y capitán de la selección germánica evitó ayer una derrota segura de su equipo frente a Irlanda, que empató 1-1 con un gol anotado en minutos adicionales.El arquero Oliver Kahn, el veterano capitán de la selección alemana, evitó ayer una derrota segura de su equipo ante Irlanda con dos intervenciones prodigiosas a los pies del artillero Robbie Keane, quien en el tercer intento sí pudo batir al meta germano para establecer el empate definitivo (1-1).Los alemanes, que se habían adelantado en la primera parte por medio de su goleador Miroslav Klose, se relajaron totalmente después, una oportunidad que los irlandeses no dejaron escapar.Primero le sacó un balón a Danien Duff en un mano a mano en el minuto 55 y repitió una acción parecida en el 89, cuando Niall Quinn puso un balón en inmejorable posición a Robbie Keane que se encontró con un inmenso Oliver Kahn. Fueron dos ejemplos de felices intervenciones que tuvo el arquero del Bayern Munich.Sin embargo, el guardavalla alemán vio todo su trabajo caer derrumbado cuando el árbitro estaba a punto de pitar el silbido final y pasaban dos minutos del descuento. Esta vez, Kahn no pudo hacer nada ante el remate seco y a bocajarro del delantero del Leeds United, Robbie Keane, quien lo batió con un disparo que pegó en el poste antes de entrar, tras un nuevo centro de Niall Quinn.“No podemos seguir cometiendo más errores de bulto como los que sucedieron ante los irlandeses, cuando permitimos el gol del empate de Irlanda. Esto nos ha dejado un poco alicaídos, pero no hay razón para darse por vencidos”, comentó Kahn tras el partido.Considerado unánimemente como uno de los mejores porteros del mundo, Kahn a sus 32 años sigue en plena forma como lo demostró hoy, catorce años después de que debutara en la Bundesliga con el Karlsruhe.<strong>Trayectoria<br /></strong>Sus destacadas actuaciones llevaron al Bayern Munich a pagar 2,5 millones de euros por su traspaso en 1994, cifra que se mantiene como la más elevada desembolsada por un portero en la liga alemana.Los éxitos en el club bávaro no se hicieron esperar. Fue campeón de Alemania en 1997, 1999, 2000 y 2001, de Copa en 1998 y 2000, de la UEFA en 1996 y el año pasado logró el doblete con la Liga de Campeones y la Intercontinental.Kahn se estrenó con la selección teutona el 23 de junio de 1995 en un enfrentamiento contra Suiza y desde entonces es inamovible bajo el marco germano, que ha defendido en 47 partidos. El colofón a su carrera sería el título mundial.