Sin que lo sospechen fueron designados compañeros. El papá se opuso a que el hijo lo imite.
José Asdrúbal y Kleiner Estuardo no son dos policías desconocidos cuando se desplazan en un Chevrolet Vectra, mientras patrullan la ciudad. Tienen algo en común: se trata de padre e hijo, que juntos combaten el hampa.
Sin haberlo pedido, el Comando Guayas Nº 2 designó compañeros de patrulla al suboficial 2º José Asdrúbal Oviedo Coronel, de 55 años, y al policía Kleiner Estuardo Oviedo Rey, de 27.
Publicidad
A las 05h30 se despiden de la familia, salen de casa y a las 06h00 se presentan en la cuadra.
Todo está cronometrado para ambos. A las 06h30 abordan el patrullero, salen del Cuartel Modelo y se encomiendan a Dios para que guíe sus destinos, afirma Asdrúbal.
Publicidad
Pese a estar concentrados, Oviedo padre dice que para nada olvidan el diálogo.
Oviedo Coronel muestra un rostro lleno de experiencias, firme, pero amable, mientras Oviedo hijo, algo alegre y a veces distraído, tiene el compañero que lo instruye y a la vez aconseja.
Así trabajan juntos, aunque José Asdrúbal revela que nunca imaginó tener como compañero de patrulla a su propio hijo.
Y como todo padre, también afirma que nunca quiso que su vástago eligiera la misma carrera que él.
Compañeros
“¡Mire!, pero ya lo es y ahora trabaja conmigo”, dice emocionado el gendarme de 55 años, nacido en el cantón Alamor, Loja.
Kleiner sabía que su progenitor tenía otras aspiraciones. Sin embargo, hace cuatro años, a escondidas, hizo los trámites y se inscribió en el curso de aspirantes.
Cuando pasó las pruebas físicas, psicológicas y culturales le avisó que se había enrolado en la escuela de Babahoyo.
Mientras patrullan, Kleiner asegura que trabajar con su padre es placentero. “Es más, me siento seguro; nos cuidamos mutuamente e intercambiamos experiencias”, dice.
El respeto está ante todo: en el trabajo y en la casa. “Aparte de ser el jefe de la patrulla, mi padre es un héroe”, expresa.
Desde noviembre del 2001 laboran en turnos rotativos. Tras 21 días continuos de 06h30 a 12h00 y de 18h30 a 24h00, salen libres tres días.
Hasta el momento no han vivido una situación de riesgo. Pero cuando se presente, “lucharemos hasta la muerte”, indica el policía hijo.
TUTORÍA
Experiencia. José Asdrúbal, con más de tres décadas en la institución, transmite sus experiencias a su hijo policía, mientras patrulla por las calles.
Trabajo. Kleiner Estuardo, lleva cuatro años en la institución como policía raso. Se graduó en la Escuela de Formación de Babahoyo.
EJEMPLO. Asdrúbal nunca pensó que su hijo llegaría a ser un policía. Hoy, que ya lo es, y como trabajan juntos, le enseña cada detalle que necesita conocer.
IMITACIÓN. Kleiner ve en José Asdrúbal, más que a un padre, un héroe, que diariamente combate el delito y que trata de salir adelante frente a todo.