Al menos 116 personas murieron al estrellarse hoy un avión con 76 ocupantes a bordo contra un grupo de edificios en las cercanías del aeropuerto de Kano, en el norte de Nigeria, informaron emisoras de radio locales.
Según las fuentes, que se remiten a recuentos de portavoces oficiales, cuarenta de las víctimas mortales se encontraban en las proximidades del lugar del impacto, mientras que el resto de los fallecidos formaban parte de los 69 pasajeros y siete miembros de la tripulación que viajaban en el aparato.
En un primer momento se creyó que el accidente se había producido durante un aterrizaje, pero el avión había llegado al aeropuerto de Kano sin problemas desde la ciudad de Jos, en el centro del país, y acababa de despegar a primera hora de la tarde con destino a Lagos cuando se precipitó sobre la populosa zona conocida como Gwammja, situada junto al aeródromo, por causas desconocidas.
El aparato chocó contra un edificio antes de colisionar con otros dos y estallar en llamas, que se extendieron con rapidez a una colonia de viviendas cercana, lo que causó la huida despavorida de cientos de habitantes de la zona.
"De repente se produjo una gran explosión y a continuación pudo verse una gran columna de humo mientras la gente comenzó a salir corriendo y gritaba sin parar pidiendo auxilio", relató uno de los testigos presenciales citados por las emisoras.
Según las fuentes, entre los edificios afectados se encuentran dos de las numerosas mezquitas que existen en esa parte de la ciudad, capital religiosa del norte nigeriano, donde la mayoría de la población es musulmana.
Los equipos de rescate continuaban a primera hora de esta noche las labores de desescombro en el área, después de que los bomberos y grupos de voluntarios necesitaran toda la tarde para sofocar el incendio causado por el siniestro.
Un testigo dijo que se podían oír gritos pidiendo auxilio provenientes del interior del avión, pero los bomberos no tenían agua y no pudieron extinguir el fuego a tiempo.