Por expulsión de José Cevallos, el arquero de 23 años tendrá la oportunidad de jugar en el torneo local.
Su figura aún está a la sombra del mejor arquero de Ecuador, José Francisco Cevallos, pero en seis años como portero suplente en Barcelona, Edwin Villafuerte aprendió a ser paciente y confiar en que su oportunidad para ascender está cada vez más cerca.
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“Yo he esperado”, manifestó, pero no con resignación, sino al contrario, con una intensa motivación. Su presencia como titular siempre está sujeta a una ausencia de Cevallos. Esta vez no es la excepción, pero a diferencia de otras esporádicas ocasiones, ahora la posibilidad se prolongará durante tres partidos.
Tras la expulsión que Pepe Pancho sufrió en el pasado clásico del astillero, Villafuerte volverá a sentir la responsabilidad de custodiar el arco del equipo ídolo del país en los tres cotejos que estará suspendido el guardavalla de la selección ecuatoriana.
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En su segunda actuación de este año, frente a Liga de Quito, Villafuerte cometió la imprudencia de reaccionar explosivamente ante la provocación de un delantero rival y el árbitro le levantó la roja. Con un hombre menos, a su equipo se le hizo difícil definir una victoria y empató.
En ese momento, recibió muchas críticas que condenaron su impulsiva actitud, pero contó que no desanimó gracias al apoyo que le dieron los compañeros del plantel y el cuerpo técnico. “Eso me bastó para devolverme la confianza en sí mismo y seguir trabajando”, aclaró.
El pasado domingo, otra opción se le presentó. Fue en el clásico del astillero, tras la expulsión de Cevallos. Con toda la presión de jugar como visitante en el Capwell, “pasaron muchas cosas por mi mente. Sí, me puse un poquito nervioso por salir al frente en un clásico que iba 0-0, con la gente eufórica, con mucha responsabilidad de arquero, con un hombre menos en el equipo”.
Sin embargo, nuevamente unas palabras que se transmitieron desde su oído hasta su alma le dieron seguridad. El preparador de goleros Walter Rolando Guerrero, también los compañeros en la banca, Luis Gómez y Alejandro Alfaro Moreno, inyectaron confianza a Villafuerte.
“Eso fue muy importante para mí, me sentí con seguridad, luego me fui asentando y perdiendo el miedo y comencé a controlar la presión del partido”, relató el guardameta de 23 años.
Sabe que la única forma de surgir es jugar y jugar. Tal vez a él se le complica porque se mantiene siempre atrás de Cevallos, pero “todavía estoy ahí, ahí a la expectativa”, indicó.
Tal vez, en algún momento, Villafuerte deseó salirse del cuadro torero para abrirse un camino en otro club. Ahora piensa en un solo objetivo: salir campeón del 2002 con Barcelona y próximamente triunfar en esta institución.
A Cevallos también le tocó esperar atrás de los arqueros Carlos Luis Morales y Víctor Mendoza. Eso alienta a Villafuerte para no ser impaciente. No sabe si le tocará seguir la misma historia, “uno no sabe qué le puede pasar mañana”, comentó y reiteró que la única forma de surgir es trabajando constantemente y “siempre pensar que uno será titular”. Precisamente esas frases se las repite el actual técnico de Barcelona, Salvador Capitano, quien considera que en cualquier momento el portero Cevallos puede emigrar al exterior.
“El profesor Capitano me ha dado mucha tranquilidad, eso me ayuda mucho en lo personal, para que así también José Cevallos vea que hay buenos goleros junto a él”.
Para Villafuerte “Pepe Pancho es el mejor guardavalla que tiene el país actualmente y está en su mejor momento”.
Pero, él también busca su oportunidad, que ahora la tendrá en tres partidos y “hay que aprovecharla al máximo”, concluyó.