Dos hermanos de 10 y 11 años son los únicos alumnos de la escuela primaria de Karluk, un pueblo en Alaska en el que habitan solo 37 personas. Pero para mantener la escuela funcionando con fondos estatales, se necesitan al menos 10 estudiantes.

Por eso, los líderes del pueblo hicieron un llamado en redes sociales: dos familias con tres o cuatro hijos son bienvenidas a mudarse a Karluk con acomodación y gastos pagados por un año. Esperaban ser contactados por un par de familias, pero han recibido miles de peticiones de personas interesadas.

Alicia Andrews, la presidenta del Consejo Tribal Karluk, le dijo al Washington Post que están siendo “bombardeados” con solicitudes.

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“Durante años, hemos estado tratando de salvar nuestra escuela y nuestra comunidad, y ahora parece que tenemos una solución”, dijo Andrews.

Incrementar el número de estudiantes no solo permitiría recibir fondos educativos, sino también salvar el edificio de la escuela. Este lugar es importante para la comunidad, pues es donde se organizan reuniones, celebraciones, se usan las computadoras disponibles y funciona como albergue para las noches demasiado frías.

Desde que perdieron además los fondos para mantener el edificio, y su mantenimiento quedó en manos del pueblo, se dieron cuenta de que es económicamente más viable mantener a dos familias por un período de un año que mantener las luces encendidas en el edificio de la escuela indefinidamente.

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Foto: Alaska Native News

“Una vez que la escuela cierre, parece que el pueblo está al borde del abismo”, dijo Dave Johnson, presidente de la Junta de Educación del Distrito Escolar del Municipio de Kodiak Island.

Pero un problema podría ser encontrar profesores capacitados e interesados en enseñar en Karluk: “Eso es lo que me mantiene despierto por la noche, encontrar al maestro”, dijo. “Los educadores pueden estar de acuerdo en venir, pero muchos ni siquiera duran el año escolar en un entorno rural remoto”, añadió.

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Idealmente, los profesores llegarían con sus hijos que también estudiarían en la escuela local.

Mientras tanto, el consejo sigue filtrando las solicitudes de los interesados. Recibieron cerca de 5,000 respuestas de familias de todo el país y algunas de otros países. Las familias ahora recibirán formularios de solicitud oficiales que el consejo intentará procesar en los próximos meses.

Se espera que el proceso culmine para que las familias puedan estar instaladas en Karluk antes de que comienze el siguiente período escolar, en agosto. Lo que el consejo busca es que los nuevos habitantes del pueblo no se impresionen con el cambio de cultura.

Karluk se encuentra a lo largo de la costa occidental de la isla Kodiak, a la que se puede llegar en un viaje en ferry de casi 10 horas desde el continente de Alaska, o dos viajes en avión desde Anchorage. (I)

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