Hay síntomas comunes que podrían alertar sobre un cáncer de testículos; sin embargo, existen señales específicas que se pueden confundir y no tienen nada que ver con la enfermedad.

Desde la organización sin fines de lucro Clínica Mayo, dedicada a la práctica de la medicina, la educación y la investigación, se explica cuáles son los síntomas más recurrentes de este tipo de cáncer:

  1. Sensación de pesadez en el escroto
  2. Dolor o molestia en un testículo o en el escroto
  3. Dolor sordo en la parte baja del abdomen o en la ingle
  4. Bulto o hinchazón en cualquiera de los testículos
  5. Hinchazón repentina en el escroto
  6. Dolor en la espalda
  7. Sensibilidad o agrandamiento en el tejido mamario
Algunos hombres con cáncer testicular no presentan síntomas. Foto: Freepik.

Cuáles son los síntomas que no son de cáncer de testículos

La Sociedad Americana del Cáncer advierte que la mayoría de las veces “un abultamiento en el testículo es el primer síntoma” del cáncer.

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Cuando se nota que un testículo está más grande de lo normal se puede asociar rápidamente como una señal de la enfermedad por lo que será necesario un chequeo médico que incluya un examen físico general para un mejor diagnóstico.

Pero, también advierte que en algunas oportunidades una inflamación testicular no siempre está asociada a cáncer.

En este sentido aclara que una hinchazón y dolor en los testículos pueden surgir por una inflamación, una infección bacteriana o viral. Hay dos tipos de inflamaciones que pueden producir dolor e hinchazón testicular:

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  • Orquitis: “es la inflamación de uno de los testículos o ambos”
  • Epididimitis: “es la inflamación del conducto en espiral (epidídimo) en la parte posterior del testículo. El epidídimo almacena y transporta el esperma”, explica Clínica Mayo.
Una infección bacteriana o viral puede ocasionar un inflamación en la zona. Foto: Pexels.

¿Cómo saber cuando el cáncer de testículo esta avanzado?

En ciertas ocasiones no se presentan síntomas en la primera etapa del cáncer testicular, sino cuando las células cancerígenas se han diseminado a otras partes del cuerpo. En este sentido la persona suele experimentar otros síntomas como:

  1. Dolor abdominal: cuando los ganglios linfáticos se agrandan o el cáncer ya está en el hígado
  2. Dolor de cabeza o confusión: cuando se ha propagado al cerebro
  3. Dificultad para respirar, dolor en el pecho o toser sangre: el cáncer ya está en los pulmones
  4. Dolor de espalda baja: cuando el cáncer se ha propagado a los ganglios linfáticos

(I)

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