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El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que la primera oleada de ataques aéreos de su país contra Irán el viernes fueron “muy exitosos”.
Dos de los aprehendidos tienen antecedentes penales.
La emboscada a los militares es una advertencia peligrosa, pero más que nunca el Bloque de Seguridad debe mantenerse firme...
Once militares murieron el viernes en una zona de Alto Punino, en Orellana, cuando realizaban tareas de control contra la minería ilegal.
Según los datos del Gobierno, un grupo de los uniformados fue atacado por la agrupación Comandos de Frontera.
La explosión en el aire se produjo en una zona donde se encuentran edificios residenciales, instituciones educativas y comercios.
El vicepresidente JD Vance, que figura en el chat de la mensajería Signal, afirmó que The Atlantic “sobrevendió” la historia.
El Kremlin ha estado haciendo todo lo posible para poner a prueba los nervios de Occidente
En Kiev y en Occidente aumenta la preocupación por la cooperación militar entre Corea del Norte y Rusia.
Los rebeldes conocidos como Estado Mayor Central (EMC) amenazaron a los asistentes a la mayor cumbre de Naciones Unidas sobre biodiversidad.
Entre estos objetivos se encontraban infraestructuras terroristas subterráneas, depósitos de armas, centros de mando militar, y más.
Con un ataque de este viernes, suman 150 los centros educativos de la ONU atacados por Israel desde que comenzó la guerra.
El gobierno iraní asegura que el ataque fue hecho en represalia a un previo ataque israelí contra la embajada de Irán en Damasco.
Funciona como un centro de comando móvil en situaciones de emergencia, como el ataque aéreo de Irán.
El Líbano, Irak y Jordania han cerrado temporalmente su espacio aéreo ante el ataque, e Israel prepara para una posible contraofensiva contra Irán.
El primer ministro de Israel aseguró que están preparados para un ataque defensivo u ofensivo contra Irán.
Otros cuatro militares resultaron heridos.
El centro hospitalario albergaba no sólo a pacientes, sino a personal sanitario y desplazados por la guerra que azota el territorio desde el 7 de octubre.
El Ejército israelí sostiene que la mayoría de las víctimas fueron en una avalancha provocada por la muchedumbre hambrienta.
Solo un país de Sudamérica forma parte del organismo.