El hincha emelecista Byron Miguel Velásquez Briones conocido como Lagartija acudió la mañana de ayer, por novena ocasión, a rendir su versión en la nueva investigación que realiza la Fiscalía de Durán por el asesinato del aficionado barcelonista George Michael Murillo León, conocido como Arenita.

El hecho ocurrió el pasado 4 de noviembre en el puente de la Unidad Nacional y desde ese día se han realizado varias diligencias. Sin embargo, el 7 de diciembre, el juez Galo Almeida Tapia resolvió anular esas indagaciones ya que los asesores legales de Velásquez comprobaron que Gualberto Salomón Jácome Chiguano, quien fue el defensor público en la detención del joven, no era abogado, sino vendedor de arroz.

Publicidad

Hernán Ulloa, asesor legal de Velásquez, criticó que en la diligencia de ayer dos uniformados de la Policía Judicial de Durán hayan intervenido.

“Los policías que estuvieron en la diligencia preguntaron si la firma que consta en el parte de aprehensión es de él. O si sabe leer y escribir. Eso le preguntaron porque los policías le leen el parte. Con eso quieren respaldarse de que le han dado a conocer sus garantías constitucionales. Pero no le permitieron realizar llamadas, no tuvo acceso a un abogado. Se irrespetó todo”, expresó Ulloa.

Publicidad

Jacinta Andrade Matute, fiscal encargada de la investigación, expresó que los uniformados estuvieron presentes porque la investigación se lleva en conjunto. Agregó que el Código de Procedimiento Penal indica que la Policía es un apoyo y un auxiliar en la investigación.

Ulloa añadió que existen irregularidades porque no se ha continuado el proceso que vincula a tres uniformados.

“El fiscal Julio Vacacela pidió hace más de un mes que se inicie instrucción fiscal a unos miembros de la Policía, el juez no ha dado paso a la audiencia de formulación de cargos. Aquí hay mano negra, aquí hay un tentáculo que no permite que se haga justicia con Byron Velásquez ni con la familia Murillo León”, criticó Ulloa.

Se trata de los cabos José Moreno y Paúl Morales, quienes elaboraron el parte de detención de Velásquez, y el teniente coronel Diego Sandoval, quien estuvo a cargo del operativo cuando ocurrió el crimen del hincha barcelonista.

Ulloa además expresó que siente temor por la integridad de Velásquez, porque patrulleros policiales frecuentan la casa del joven. “Yo estoy aquí porque me comprometí con la familia Murillo (del hincha de Barcelona fallecido) para que se encuentre a la persona que asesinó al chico. Es lo único que queremos”, expresó Velásquez.

La Fiscalía indicó que continuará receptando versiones.