La mañana de ayer los residentes de la urbanización Bona Terra, en la vía a Salitre, se reunieron en el club social para conversar sobre los daños que se han presentado en sus viviendas, pese a ser un plan habitacional que se inició hace menos de tres años.
Leonardo Vizuete, quien vive en la urbanización desde marzo del año pasado, dijo que al mes de haberse mudado el yeso del tumbado de la planta baja de su casa empezó a deteriorarse.
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Actualmente, una parte del tumbado tiene un agujero. El residente cree que la perforación se formó a causa del agua que se filtra por uno de los baños que tiene en la planta alta de la vivienda.
“Para nosotros arreglar eso tendríamos que sacar toda la plancha (de yeso)”, mencionó.
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Vizuete dijo que avisó del desperfecto a la Administración, pero no le han dado solución al problema. Por ello, desde marzo de este año suspendió el pago de las alícuotas.
Stalin Vinces, a quien le entregaron la casa en diciembre del 2010, también se quejó porque, según él, la constructora encargada ha utilizado materiales de “pésima” calidad.
Contó que a los tres meses de haber recibido la vivienda empezaron a formarse fisuras en las paredes de los dormitorios, comedor y sala.
Agregó que después de tres meses, personal de la empresa JAC Construcciones acudió a reparar las fisuras, pero con la llegada del invierno del 2011, los arreglos no duraron.
Por eso, dijo que su casa se llenaba de agua cada vez que llovía. “Tuve que poner baldes para parar un poco”, anotó.
El pasado jueves, Julio Andrés Ching, representante de JAC Construcciones, señaló que las viviendas no tienen fallas de edificación, y que las fisuras se originaron por el asentamiento del terreno. Explicó que durante el primer año se da el 80% de estos.