Al entrar a La cueva de la montaña, lugar en el que ensayan, todo se torna retro y cobra sentido.

El afelpado estudio, situado en la vía a la costa e infestado de instrumentos musicales, amplificadores y equipos, es el epicentro de donde surgen las composiciones de rock clásico de Cactus Gamarra, banda guayaquileña conformada por peculiares personajes como Thomas Cansing (voz y guitarra), James Thompson (teclados), Frank Rizzone (batería), Erick Villegas (bajo) y Dave López Jr. (guitarra).

Publicidad

“Queríamos hacer música electrónica y terminamos teniendo una banda”, comenta James, cuyo apellido artístico y rasgos físicos recuerdan al estrafalario periodista gonzo Hunter Thompson (+).

Cactus Gamarra lanzará en un mes y medio su primer disco, el cual pudieron grabar por autogestión. Cuenta con seis canciones y esperan enviarlo en estos días a Colombia para su reproducción. Además, bajo la dirección de Andrés Cajas, graban el video de la versión acústica de uno de los temas del disco.

Publicidad

Pero el inicio del trayecto experimental de Cactus Gamarra se remonta al 2006, año en el que James y Thomas comenzaron a hacer música electrónica. Luego, para darle cuerpo y forma a la banda, se fueron sumando otros músicos, quienes pese a no formar ya parte del grupo, en su momento colaboraron con las letras, cuya estructura recae ahora sobre la mente creativa de Thomas. En relación a la composición musical –que en su totalidad nace y se pule en La Cueva de la Montaña– Rizzone asegura que todos aportan con ideas. “De lo que parte de algún riff de guitarra o bajo, todos vamos aportando y se va quedando la canción”.

La combinación del nombre con el que se dieron a conocer fue producto de una lluvia de ideas y como suele suceder en toda banda, los personajes de Cactus Gamarra aseguran que su música antes era más experimental conceptualmente, eran más como jams y como se conocían improvisaban y salían cosas “bacanes”, pero después decidieron tratar de aterrizar más las canciones para que la gente las pudiera interpretar mejor.

En cuanto a sus inspiraciones, Thomas explica que cada tema tiene una historia diferente y que ellos no buscan generar un sentimiento directo hacia la persona, sino que esta la interprete como quiera. Rizzone añade: “La gente clasifica la música por género por una cuestión de comercio, pero hoy en día las bandas ya no entran dentro de un género porque tratan de fusionar experiencias sentimentales, sensoriales y lo que viven en el día a día”. Para escucharlos ingresa a cactusgamarra.bandcamp.com y para solicitar su disco escribe a bookingcactus@gmail.com o búscalos en Facebook y Twitter.