En esta graduación, la tradicional capa fue sustituida por una cinta en la cual se leía: chofer profesional. Era el símbolo de un título alcanzado y motivo de orgullo para Carmen Pineda, Lucía Calderón y Ángela Páez, madres de familia y conductoras de expresos escolares, quienes sonrientes intercambiaban anécdotas mientras esperaban el inicio del acto de graduación. Ahí iban a recibir oficialmente aquella investidura.