Fundación Natura elabora un plan de manejo ambiental ante los daños por invasiones.
Quien observa a simple vista el bosque protector Cerro Colorado, denominado así por el terreno arcilloso de tono rojizo que caracteriza al área de 325,43 hectáreas, puede pensar que solo se trata de un conglomerado de matorrales, suelo árido.
Un lugar sin valor.