“Imagínense que más tarde, bravos porque la Península se convirtió en provincia, impida el acceso por la autopista Guayaquil-Salinas”, agregó.
El Presidente dijo que la autonomía tiene límites, “no puede atentar contra intereses nacionales y el puente de la Unidad Nacional es la obra de infraestructura más importante del país y no puede venir un alcalde despistado, acostumbrado a ser virrey, o que creyó su feudo, a decir por aquí no pasa el transporte masivo”.
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Correa hizo alusión al paso por la av. Benjamín Rosales, que conecta con el puente de la Unidad Nacional. “O autorizo (refiriéndose a Nebot) que pase (el transporte masivo por el puente); entonces le prohíbo pasar por la calle de 800 metros hasta la terminal. A otro con esa bravuconada, entienda que desde el 15 de enero ya hay presidente, ya nadie le va a pedir permiso para hacer las cosas".
El alcalde Jaime Nebot respondió al Mandatario, durante su visita a la terminal terrestre: “Yo soy alcalde y no virrey, él es presidente y no rey. Y aquí no está nadie por encima de la ley. Y una vez que hemos marcado la prioridad que tenga una feliz Navidad. ”.