“Es su cumpleaños, por eso la traje, pero antes de escoger la muñeca pregunté si tenía o no plomo. Ellos me dijeron que estas no son de la serie que está prohibida”, señaló Arteaga mientras mostraba en las afueras del local la muñeca Bratz que obsequió a María.

“Da miedo”. Esa fue la expresión de Ana Ullauri mientras recordaba las noticias que vio en la televisión y que difundían sobre el retiro de los juguetes contaminados con plomo de la marca Fisher-Price del fabricante Mattel.

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“De inmediato le indiqué a mi hija que revisara el juguete que, en diciembre pasado, le regalaron a mi nieto que tiene un año y cuatro meses”, dijo Ullauri, aunque recordó que –según las noticias– el problema de contaminación se produjo en la producción realizada entre abril y julio de este año.

Ella recalcó que los importadores de juguetes son los primeros llamados en verificar que tengan las garantías.

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“Como madre estoy preocupada. Deberían difundir ciertas recomendaciones para poder tomar precauciones al comprar un juguete de las marcas que están prohibidas”, indicó Isabel Orozco, quien estaba en compañía de sus dos hijos, de 11 y 4 años.

Igual inquietud manifestó Jorge Bustamante, quien caminaba en compañía de su nieto de 2 años. “El Gobierno debería tener más cuidado. Es verdad que causa preocupación. Yo trataré de comprar ropa antes que un juguete”, añadió.

Martha García, moradora del suburbio, mencionó que solo conoce que la contaminación de los juguetes es por la pintura. “Yo no he comprado porque mis hijos están grandes, pero sí nos intriga. Pienso que se debería difundir más información sobre el tema”, refirió esta mujer mientras era escuchada por sus hijos de 19 y 9 años.

“Escuché las noticias, pero como soy pobre no compro esos juguetes”, dijo otra mujer que prefirió omitir su nombre. Otras dos personas dijeron desconocer el problema de los juguetes.

TEXTUALES: Información

Isabel Orozco
Madre de dos menores

“Estoy preocupada. Deberían difundir recomendaciones para tomar precauciones al comprar un juguete”.