Se trabaja en la recuperación de elementos de madera
Antiguo edificio desaparece

Por su avanzado deterioro, el inmueble ubicado en Malecón y Elizalde no será restaurado.

A fines de julio se desmontará todo el antiguo hotel París, edificación ubicada en Malecón y Elizalde que data de inicios del siglo XX y cuya estructura está deteriorada al máximo.

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Técnicos del Instituto de Patrimonio Cultural trabajan en la restauración parcial de ventanales, puertas, balaustres y pórticos, para una posible recreación.

Luego de un acuerdo alcanzado el pasado mes con la propietaria del inmueble, la compañía de Inversiones y Predios, el Instituto de Patrimonio Cultural inició en este mes el desmontaje del edificio, cuya construcción data de principios del siglo XX.

Previamente se realizó un estudio para verificar el estado del inmueble y se elabora un inventario de lo que se debe restaurar y desechar.

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La semana pasada culminaron los trabajos de desmontaje de puertas, ventanales y balaustrada; también se quitó la cubierta de zinc que componía la fachada del edificio. Sin embargo, aún queda por sacar otros ventanales del interior.

Cuatro arquitectos, tres restauradores y un grupo de obreros se encargan del desmontaje, levantamiento de información de la estructura y de rescate de los materiales y elementos que aún no han sido deteriorados. El desmontaje tiene un costo de 70 mil dólares y su culminación está prevista para fines de julio.

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“Hay elementos que se los está rescatando como pórticos, balcones, marcos, puertas ventanas y balaustrada, que son de pino norteamericano”, indicó Carlos Pacheco, uno de los restauradores

La restauración implica primero quitar la pintura para dejar como superficie la madera que aún está en buenas condiciones; de allí, agrega Pacheco, se limpia con etanol (alcohol) y se le añaden preservantes que no contengan como elemento el pentacolorofenol (químico que es tóxico para el ser humano).

La aplicación de preservantes se realiza en dos métodos: por impregnación (con brocha) y por goteo (similar a un suero); señaló que la restauración terminará en unas tres semanas, luego de lo cual vendrá el embalaje de las piezas.

Estos elementos serán útiles en un futuro. José Chancay, del Instituto de Patrimonio Cultural, indicó que como no se restaurará el inmueble, están recuperando los elementos más importantes para hacer una recreación en el nuevo edificio que se construya en el mismo lugar.

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La futura edificación puede ser un hotel o un centro comercial, pero dentro de él se hará una recreación del inmueble antiguo, es decir, se va a crear un ambiente conservando las partes originales como una muestra.

No descarta que en un futuro se pueda efectuar una réplica en otro lugar como el Parque Histórico, pero esto no ha sido aún definido.

Sobre el avanzado deterioro de la estructura, dijo que entre tantos factores, el medio ambiente es muy agresivo para la madera, “sobre todo por la existencia de insectos xilófagos (que comen madera), como termitas y polillas”.