Las cifras preocupan y dan cuentan del riesgo que enfrenta la niñez guayaquileña. En la ciudad, el 21% de niños menores de 5 años sufre desnutrición crónica y el 27% tiene desnutrición global.
Ambos factores, señala el médico Luis Alberto Mena, de la Dirección Provincial de Salud, influyen directamente en la talla y el peso de los niños en relación con la edad y su desarrollo intelectual.
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Eso explica que solo el 2% de los 14.950 menores de 5 años que habitan en Bastión Popular tenga un desarrollo general óptimo, el 29% un desarrollo de alerta y el 55% de riesgo, de acuerdo con un estudio demográfico realizado en la zona.
Los factores más afectados por el bajo desarrollo, explica Gricelda Cabrera, de la fundación Enmanuel, son el lenguaje, la motricidad fina, motricidad gruesa y la conducta personal social de los niños.
La falta de alimentación, de acceso a la educación y a la salud producto de la inequidad económica y la pobreza, es una de las amenazas más grandes que sufre la infancia del país.
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De ahí, señala Consuelo Carranza, oficial de Comunicación de Unicef, la necesidad de priorizar los recursos para la niñez y adolescencia, porque “el desarrollo saludable de los niños es prioridad para el futuro de la sociedad”.
El tema fue abordado ayer durante el seminario ‘Cuando la primera infancia es sujeto de la noticia’, que la Red Cantonal de Desarrollo Infantil (agrupa a 28 entidades) y la fundación EL UNIVERSO dictaron a periodistas.
Carranza explica que la atención y la buena nutrición a los niños menores de 6 años es básica, porque es la etapa de mayor desarrollo. Si no hay una buena nutrición ni estimulación temprana o se da después de esta edad quedan vacíos en la formación que nunca se logran recuperar.
NIÑEZ
SALUD
Dos enfermedades ponen en riesgo la salud de los niños y niñas menores de 5 años en Guayaquil: las infecciones respiratorias agudas (173.534 casos se registraron en el 2004), y los síndromes diarreicos agudos (58.317), según estadísticas de la Red de Desarrollo Infantil.
INTERVENCIÓN
La Red de Desarrollo Infantil de Guayaquil trabaja en orientación y educación familiar para mejorar la condición de los niños. Las ONG dan opciones de alimentación y promueven la capacitación de los moradores de barrios urbanomarginales con el programa Correo Familiar, a través del cual les hacen llegar cartillas educativas a cada casa con un mediador o cartero, que explica y reflexiona sobre determinado tema.