Los manglares de Puerto Hondo, situados en el kilómetro 19 de la vía a la costa, recibieron ayer a más de 300 visitantes que provenían no solo de Guayaquil, sino de las parroquias rurales cercanas a ese brazo de mar. Desde las 11h00 las familias empezaron a llegar con agua, coches para bebés, carpas y parasoles, para disfrutar de la refrescante brisa.